De los cinco motores a las tres R

El presidente Hugo Chávez es un gran creador de marcas, bien sea para estigmatizar a sus adversarios (Los Frijolitos, Escuálidos), bien sea para lanzar sus propuestas y acciones políticas. Las tres R es la nueva marca, creada en el contexto de la derrota electoral del 2 de diciembre, una derrota calificada como victoria pírrica y de mierda de los adversarios pero que ha llevado a una Revisión, Rectificación y Reimpulso del proceso revolucionario, que tal es el significado de las tres R.
Sin embargo, las tres R como marca adolece de lo que le sobraba, por ejemplo, a los Cinco Motores, la anterior marca política lanzada hace alrededor de un año tras la victoria electoral del 6 de diciembre de 2006. Los cinco motores llamaban a la acción, al movimiento, fueron una gran metáfora de la acción política por venir, incluso parecían los motores de uno de esos vehículos espaciales que funcionan por etapas, el motor habilitante daría fuerza al motor constituyente que sería la base para que el motor moral y luces, el motor de la geometría del poder y el motor del poder popular nos llevaran rumbo al socialismo del siglo XXI. Pasamos un año completo oyendo explicaciones, viendo publicidad oficial al respecto y metidos en una campaña electoral para aprobar o no el segundo motor. La marca fue tan buena que incluso a la hora de engavetarla produjo una excelente imagen tras el anuncio del Presidente de que esos motores estaban fundidos.
Las tres R no han producido nada parecido. Primero porque parecen hechas como reacción inmediata y poco elaborada a la derrota electoral; los cinco motores no eran la marca de una política de un solo año, la derrota del 2D no estaba en los planes y por ende el camino al socialismo del siglo XXI estaba trazado hasta el final llevado por los motores; al quedarse inesperadamente sin motores, algo tenía que sustituirlos rápidamente. Segundo, porque no llaman al movimiento, a la acción política, las tres R llaman al repliegue y a la retirada, conceptos que no van muy bien con el carácter del propio Presidente y de su proyecto, por eso sus acciones posteriores a las tres R son más bien de huida hacia adelante (forzar una situación de definición entre Colombia, las FARC y Venezuela; proponer nuevamente la reelección indefinida). Tercero, revisión y rectificación hablan de un camino errado y la revolución iba indetenible, triunfadora, para de pronto tener que mirarse a sí misma y no al futuro. Por eso, las tres R no se están explicando, no hay publicidad que nos diga los pasos a seguir, las metas a lograr con las tres R. Más temprano que tarde esas tres R serán sustituidas por otras tres R que ya están en el tapete y que son las que realmente están marcando la política actual del gobierno de Hugo Chávez. Pero de ellas hablaré en la próxima entrada.