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26 de febrero de 2007

Eladio Lares y Los Infiltrados

En una edición del 2 de Oro, Radio Caracas Televisión decidió entregarle el premio al mejor programa del canal a ¿Quién quiere ser millonario?, un programa franquicia, convirtiendo uno de los escasos momentos donde la televisión venezolana intenta celebrarse a sí misma en una confesión de culpa: Nos falta creatividad e innovación, por eso el mejor programa que hicimos este año lo compramos, agregamos agua y listo.
El Óscar de este año terminó pareciéndose al 2 de Oro. Los Infiltrados es una muy buena película, pero es un remake. Premien todos los elementos de la película, premien al director por su trabajo, inventen una categoría de mejor nueva versión, pero al darle el galardón como mejor película, lo que están diciendo es que este año lo mejor que hizo la industria fue tomar una película china y ponerla en cristiano. Bueno, de repente es un acto de sinceridad, tomando en cuenta el empeño de Hollywood en rehacer todo lo que haya estado alguna vez en pantalla.

22 de febrero de 2007

¿1 dólar por 2 bolívares?

Yo no soy matemático, pero me huele a un error en matemáticas. Si tú divides un elemento de la relación por una cifra, tienes que dividir el resto de los elementos por la misma cifra para que la relación se mantenga, de lo contrario se pierde la relación. Con la paridad cambiaria debería ser lo mismo. Por ejemplo, 1$ = Bs. 2150; al dividir 2150 entre mil no conservas la relación, para conservar la relación también tendrías que dividir 1 entre mil.
Al interior de la economía venezolana parece un simple cambio nominal, con sus ventajas (simplificación de las operaciones económicas) y sus desventajas (ajuste de cifras inflacionario). Pero la moneda no es solo una expresión nominal, también es una expresión de valor. Al comparar la moneda simplificada (mas no fortalecida) con otras monedas, la expresión de valor se impondrá sobre la expresión nominal: Un dólar, un euro, un peso, no valen esa cantidad de bolívares. Así, cuando en el mercado venezolano compremos una televisión por 1000 bolívares con nuestro sueldo de 1400 bolívares, todo perfecto, todo simple. Pero cuando el comerciante intente ir con esos 1000 bolívares a comprar una nueva televisión por 500 dólares, muy probablemente no encontrará vendedor de televisiones, o mejor dicho, comprador de bolívares.
El asunto no está completo sin tomar en cuenta que Venezuela tiene un gran vendedor de divisas en el mercado: el Estado. Divisas que recibe independientemente del comportamiento de la economía del país. Tal vez el Estado podrá mantener la ilusión de un cambio fuerte mientras se convierte en el único ente dispuesto a recibir bolívares y en el único importador del país.
En todo caso, pasará lo mismo que está sucediendo ahora, 2150 bolívares por un dólar es percibido como una ganga; 2 bolívares por un dólar será una ganga mayor porque el único dispuesto a recibir tus 2 bolívares no aceptará que tiene que pedir muchos más bolívares por cada dólar. La pregunta que nos haremos será cómo aprovechamos esa ganga.

21 de febrero de 2007

Autoayuda en el Socialismo del Siglo XXI

Como una contribución al entendimiento del venezolano promedio de los cinco motores de la revolución y del socialismo del siglo XXI, hemos decidido rescribir una serie de títulos famosos de la autoayuda, de la gerencia y de la psicología, adaptándolos a los nuevos conceptos morales, económicos y políticos que los socialistas de la patria tienen que conocer, manejar e interiorizar hasta convertirlos en sus principios rectores y sus valores fundamentales de acción.
El primer título será: ¿Quién se ha llevado mi quesera?, dirigido a comerciantes y productores agropecuarios y de alimentos en general, donde se les explicará su papel en este nuevo sistema económico de producción social, comunitaria y solidaria. Tras la lectura del libro, los comerciantes y productores no solo quedarán curados de cualquier impulso egoísta capitalista de especulación y acaparamiento, sino que estarán dispuestos y ávidos por solicitar en nombre de los fines superiores y estratégicos de la distribución de alimentos por parte del Estado, medidas de intervención y expropiación, temporales o permanentes, de sus negocios y empresas.
Después de este esfuerzo, vendrán otros títulos que iremos informando.

20 de febrero de 2007

La h en sms

Si alguien me manda un mensaje de texto diciendo que no puede asistir a una cita por sentirse mal, no tengo problema alguno en preguntarle q 100ts?; tampoco tengo reparos en cambiar la doble L por la Y o de poner K en lugar de la sílaba ca. Pero me niego rotundamente a prescindir de la H a pesar de lucir inútil en un código que intenta ser simple reproducción de sonidos. Porque lo que convierte a la H en una letra especial, hermosa, única, cobra mayor importancia en la mensajería de texto: Nombrar el silencio, pronunciarlo, darle sonido sin romperlo, brindándonos la oportunidad de hacer entre letra y letra eso que cada día se estila menos: Pensar en lo que estamos diciendo y escribiendo.

17 de febrero de 2007

Blanco ser más inteligente

Hay una secuencia de Blood Diamond que revela en toda su magnitud los prejuicios que guían este enésimo acercamiento al drama africano desde Occidente. Cuando el triángulo principal de la trama (El traficante blanco, la periodista blanca y el inocente papá negro) salen de la granja de rehabilitación de niños de la guerra, lo hacen acompañados del director negro de la granja. En el camino se encuentran con una alcabala de guerrilleros: Dos niños de unos 10 años empuñando inmensas armas. El traficante, el personaje de Leonardo DiCaprio, sabe exactamente qué hacer, pero quien va al volante es el director y éste decide hacer exactamente lo contrario que le indica Leo. Al intentar dialogar con los niños uno de ellos simplemente le dispara al director obligando a una rápida acción evasiva por parte del hábil traficante.
Lo importante de este disparo es su poca importancia, no tiene ninguna incidencia en la trama, el herido no detiene o desvía al resto, ni siquiera los retrasa, el trío simplemente llega al sitio donde se dirigían, en el cual, de paso, existen todos los servicios médicos para atender y salvar al director, del que no sabemos más en el resto de la película. No es un nuevo conflicto y como obstáculo resulta baladí, no hay crecimiento de los personajes ante esta prueba, no hay decisiones impostergables, bifucarciones que compliquen el objetivo final, ni siquiera un simple incremento de las tensiones para elevar el clímax de la historia, nada. Así, la escena está ahí para mostrarnos una vez más, a la mitad de la película y cuando ya está más que clara, la superioridad de Leo. No sirvió de nada que el herido tuviera un centro de atención de niños de la guerra, niños víctimas y también niños victimarios; tampoco es importante que el centro subsista por la mano izquierda con que tratan a guerrilleros y al gobierno de Sierra Leona; no, simplemente Leo sabe más que el director, Leo sabe exactamente lo que hay que hacer y el director no tiene puta idea y casi se muere y matan al resto por su culpa. No debí haber conversado, dice el director, por si no nos hubiera quedado completamente claro que el blanco no se equivoca, el negro sí.

16 de febrero de 2007

¿Adiós Libertad de Expresión?

No se trata de discutir si tienen razón en el caso particular. Si la Primera Niña del país, su papá o su mamá se sintieron dañados moralmente o sometidos al escarnio público por el artículo de Laureano Márquez (Aunque el juicio habría sido un buen momento para que validaran la acusación), o si la junta directiva del IVIC realmente ya no puede confiar en Claudio Mendoza; lo cierto del caso es que dos temas de los cuales un país debe hablar tienen dos sancionados por hacerlo: La influencia del entorno presidencial sobre las decisiones del Presidente y las consecuencias u orientaciones de las políticas públicas que un gobierno realiza. Hoy, muchos venezolanos podrían decidir callar sus opiniones y pareceres, sus argumentos y puntos de vista por temor a represalias, minando la capacidad de la sociedad toda para debatir y avalar decisiones que la afectan. Por eso, la libertad de expresión es un derecho general y no únicamente una garantía personal; y por eso las vías para combatir los posibles excesos de un individuo en el uso de la libertad de expresión intentan no dañar el derecho de la sociedad toda. En ambos casos, las vías utilizadas para combatir los posibles excesos muy posiblemente dañaron el derecho de la sociedad toda. En el primero, al activarse un proceso sin que la principal afectada, a través de sus representantes, haya dicho ni siquiera si el eco del artículo llegó a sus oídos; en el segundo, por la desproporción entre el hecho de publicar un artículo de opinión y el de ser destituido de una junta directiva por ello.

13 de febrero de 2007

Gozón después de muerto

La última entrada de Saparapanda me hizo recordar una conversación que tuve hace unos diez años. Mi amigo me comentaba cómo le había ido a un grupo musical del cual era muy cercano en un viaje a una feria literaria en México: Un éxito total, tuvieron presentaciones extra, están por concretar un nuevo viaje, rumbearon burda y se hicieron panas de un gentío importante: una noche estuvieron cayéndose a palos con Jorge Luis Borges. Ahí salté alarmado. No tanto porque Jorge Luis Borges tuviera para ese momento unos diez años de muerto sino porque creo que nunca nadie lo había imaginado cayéndose a palos. Pero lo que le señalé a mi amigo fue lo primero: Coño, men, no creo que haya sido con Jorge Luis Borges, porque tiene como diez años de muerto. Y mi pana, con un desparpajo y una arrogancia capaces de desafiar la muerte, me retó a contestarle: Ajá, ¿y entonces con quién fue?

12 de febrero de 2007

Lecturas de una foto


Esta foto de Spencer Platt se hizo merecedora del reconocimiento como la mejor del año por parte del World Press Photo. La misma, muestra los contrastes en Beirut tras un ataque israelí: Por un lado, destrucción, por el otro, exhibicionismo. He leído interpretaciones sobre la foto que hablan de indiferencia entre una realidad y otra, o peor, entre una realidad dramática y un mundo de oropel. No comparto esta opinión, porque no veo indiferencia en los ocupantes del carro, tampoco veo urgencia en los que están en la acera. La foto no parece haber sido tomada inmediatamente después de un ataque, la gente, tanto los del carro como los transeúntes parecen más bien intentando retomar el ritmo normal de sus vidas pasada la emergencia y el terror, pero aún así no pueden dejar de mirar los lugares que tal vez solían frecuentar y que ahora no existen. Quizás los dos hombres que hablan por celular en el lado derecho de la foto sean afectados directos de los ataques, bien podrían haber tenido un negocio en el edificio destruido, pero incluso ellos lucen ya acostumbrados a la nueva realidad, haciendo las llamadas de rigor, como si lo sucedido se tratara de un percance y ahora lo que queda es esperar que la compañía de seguros responda.
Me gustó más bien pensar en esta foto como el contraste entre lo que somos y lo que queremos ser, entre la imagen que nos atribuimos y el espejo donde nos obligan a reflejarnos. Beirut, y muchos otros lugares del mundo, quisiera estar sentado en un convertible rojo, pero lo llevaron a ser un montón de ruinas.

11 de febrero de 2007

La furia del cerrador




De los 27 outs de un juego de béisbol, suele decirse que hay 9 particularmente difíciles de sacar: los del primero, quinto y noveno inning. Los tres del primero, por aquello del juego que comienza y las expectativas que tiene el pitcher sobre si sus lanzamientos tendrán en los bateadores el efecto deseado: Apenas hay una demostración de que el veneno de los pitcheos no es el esperado, la confianza puede derrumbarse. Los tres del quinto, porque la regla dice que para que la victoria del equipo se le anote al pitcher abridor, éste tiene que lanzar al menos cinco innings completos: Si el lanzador se mete en problemas en esa entrada, inmediatamente el fantasma de no perder la decisión lo ronda. Los tres del noveno, los de terminar la faena, son tan difíciles que poseen una estadística propia, la del juego salvado, y hoy por hoy hay especialistas cuya función como lanzadores es salir en el noveno cuando el equipo está ganando y sacar los últimos outs del juego.
Estos lanzadores, los cerradores, suelen ser recibidos en los estadios de las Grandes Ligas, con temas alegóricos al miedo, a la humillación del rival y a la propia superioridad o inclemencia. De ellos se pide una actitud de furia, de fiereza, o de frialdad extrema. Tienen que parecer de fuego o de hielo cuando están parados sobre la lomita.
Venezuela ha producido muy buenos cerradores, incluso en la actualidad uno apunta hacia la grandeza: Francisco Rodríguez. Pero tres de ellos se han metido en problemas importantes con la justicia, por lo cual cabe preguntarse si lo que los scouts y técnicos vieron como cualidades de cerrador, la rabia, la furia, la capacidad de lanzar por explosiones de adrenalina, eran más bien aspectos de la personalidad de estos jugadores que debían ser tratados de otra manera y no como su vía hacia el éxito deportivo.
Julio Machado, el hombre iguana, tuvo una corta carrera en las mayores, truncada por el asesinato de una mujer: Circulando por Barquisimeto en su camioneta, Machado tuvo un altercado con un conductor, sacó un arma y disparó al otro vehículo, con el resultado fatal.
Ugeth Urbina, el relevista venezolano con más juegos salvados en las Grandes Ligas, 237, fue acusado de intento de homicidio por haber agredido a unos cuatro individuos durante una fiesta en la finca que el pelotero tiene en los Valles del Tuy. Más de un año después del hecho, el juicio dará comienzo este martes 13 de febrero, si no hay ningún aplazamiento.
Francisco Buttó, relevista promesa, ya es el lanzador con más juegos salvados en la historia de las finales del béisbol venezolano, pero está involucrado en el asesinato del bat boy del equipo Tigres de Aragua, para el que juega Buttó. Hoy salió publicada la noticia que tras declararse culpable, Buttó fue condenado por homicidio culposo a 1 año y 8 meses bajo régimen de presentación en el Juzgado, quedando aún por definirse el tema de su prohibición de salida del país y con ello su futuro en el béisbol de Grandes Ligas.
Como dijo alguna vez Jorge Luis Borges, dos es coincidencia, tres es confirmación.

Para seguir en el tema, visita la entrada La Furia del cerrador II.

9 de febrero de 2007

Quiero mis letricas

Imagino la situación: Chris Gardner viendo alguna película basada en hechos reales, de ésas que terminan con unas letricas vía generador de caracteres donde te explican qué están haciendo ahora o qué fue de la vida de los personajes una vez terminada la película. Gardner, un tipo que debe tener un ego del tamaño del rascacielos donde trabaja debe haber dicho: Yo quiero mis letricas. Y de pronto se dio cuenta de que si algo tiene es dinero, el suficiente como para comprarse no solo sus letricas sino una película completa sobre su vida. Un par de llamadas y al día siguiente le dicta un par de cosas a un guionista, insistiendo mucho en cómo tenía que correr para llegar de un lugar a otro porque, qué horror, ni carro tenía, mucho menos dónde vivir y terminó durmiendo varias noches en refugios porque la pasantía en la casa de bolsa era, qué horror, no remunerada. Luego otras dos llamadas diciendo que quería a Will Smith, que es tan bien parecido como era él en aquel entonces, y no importa el salario porque si algo tiene Gardner es cómo pagar. El guionista terminó el guión y por supuesto Gardner no estaba satisfecho: A esta parte de mi vida te dije que la llamo corriendo por estúpido y a ésta persiguiendo la felicidad, es más, chico, ése debe ser el título de mi película, Persiguiendo la Felicidad. Sus deseos son órdenes, después de todo la chequera es suya.
Y como un tonto, uno va a ver la película, porque a Will Smith lo nominaron al Oscar -quién sabe si después de otras dos llamadas de Gardner- y de pronto, casi a los cinco minutos de empezada, uno se da cuenta de que la película no va para ningún lado pero uno cree que sí, que en algún momento sabrás por qué te están echando el cuento de cómo Chris Gardner se hizo corredor de bolsa, sólo que el bolsa es uno porque ya a la mitad de la película se está completamente seguro de que se trata de un mero ejercicio de egocentrismo y el resto sirve únicamente para confirmarlo.

6 de febrero de 2007

Nicknosis

Siempre me han fascinado los Nicks que leo en el Msn. Frases que las personas ponen para expresar una postura, una opinión, un estado de ánimo o una simple estupidez. De esa fascinación nace Nicknosis, un blog que mantendré paralelo a éste, más temático, más específico. Te invito a darle un vistazo.

4 de febrero de 2007

Librero jodedor

Escuchado en una librería de Caracas:

-¿Tiene La Enfermedad, de Barrera Tyszka?
-Uy, espero que no. ¿Cuáles son los síntomas?

3 de febrero de 2007

Paradoja de los tiempos que corren

Cuando la Revolución está en el poder, lo revolucionario es ser contrarrevolucionario.